Los problemas del convertidor de par pueden ser debidos a múltiples factores,  pero existen una serie de causas, que se repiten de manera más habitual:

Al montar y desmontar el motor o la caja de cambios automática, en ocasiones ocurre que no se coloca correctamente el convertidor dejando desencajadas las chavetas. Cuando el vehículo se pone en funcionamiento, la falta de engranaje correcto hace que se averíe el convertidor.

Si el vehículo excedió su capacidad de remolque durante un período prolongado, puede ocasionar daños en el convertidor de par.

Cuando los componentes internos se encuentran viejos y desgastados, es evidente que causarán fallos en el convertidor.

A medida que los convertidores se desgastan, las paletas se van doblando. Esto puede ocasionar cambios lentos o incluso una fallos en la conducción. Cuando las paletas comienzan a doblarse, una de las primeras señales de advertencia es que el motor acelera más de lo normal. El problema desaparecerá a medida que el sistema comience a calentarse. Esta puede ser otra señal de fallo en el convertidor.

Sentado en el asiento del conductor, enciende el motor. Deja que el vehículo caliente durante 4-5 minutos y luego pisa suavemente el acelerador, realizando esta acción un par de veces.

Cuando vuelva a estar inactivo, pisa firmemente el freno y luego mueve lentamente la transmisión a través de todos los engranajes, incluida la marcha atrás. De nuevo, intenta identificar ruidos extraños y verifica si alguno de los engranajes falla.

Realizamos una prueba en carretera, comprobando la oscilación del cuentarrevoluciones a régimen constante, y la vibración del vehículo en condiciones concretas (entre 1500 y 1800 rpm)Una avería en el convertidor de par, puede enmascararse como otros problemas. Sin embargo, al saber cómo verificar las señales de advertencia, lograremos identificarlas y resolverlas, antes de que causen grandes averías.